jueves, 5 de mayo de 2011

Cuando me haya ido


Cuando ya me haya ido,
búscame en el horizonte,
búscame en el tenue ocaso
y me encontrarás con el lucero.
No te canses,
no me olvides,
solo... búscame.

Piensa en aquel arroyo,
búscame en el agua fresca
siéntela cerca tuyo y sentirás mis labios,
mis besos cuál fruta tierna y fresca.
No estés triste, no llores, solo recuérdame.

Recuérdame en la sonrisa de un niño
en la inocente brisa que se transforma en vendaval.
Recuérdame en las flores,
en la fuente de agua viva,
en el vuelo de un ave,
en la luz de un candil encendido.

Cierra los ojos y escucha tu corazón,
él te abrirá el cofre de los recuerdos,
él, me traerá de vuelta a ti,
Él, te recordará que te quise, te quiero y te querré.

Cuando me haya ido,
no mueras conmigo,
vive por mi y por ti,
hónrame así.

Nunca olvides que estoy contigo,
tomándote de la mano,
aunque solo la sientas como una brisa
Besándote y acariciándote aunque no lo creas.

Cuando me haya ido,
no desesperes, no llores,
búscame en tu corazón
y allí me encontrarás solo para ti,
eternamente.

Mario Benedetti

4 comentarios:

  1. Cierto y además muy bueno...Gracias por siempre estar pendiente del Blog amiga Un Rincón para la poesía siempre estará allí, haciendo lo que sabe hacer.

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  2. HOY ES UNA FECHA MUY DOLOROSA PARA MI ES EL ANIVERSARIO DE UNA HERMANA Y ESTE POEMA ME LLENO EL ALMA.

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  3. Excelente que haya disfrutado el poema. Las pérdidas de seres queridos es mejor verlas como que ese ser querido sólo se nos adelantó en el camino, queda de nosotros hacer lo mejor posible para que en este largo camino que nos queda, hacer las cosas de mejor forma

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